El paso del tiempo es un mal de lo que nada puede escapar, ni tan solo nuestro sofá el que veríamos como un elemento de decoración robusto, con los años acaba perdiendo su lustre.
Normalmente, con el paso del tiempo, los sofás tienden a hundirse, la espuma de los cojines se ve afectada por el paso del tiempo y pierde su firmeza. Los muelles también son un problema habitual en este mobiliario con el paso del tiempo.
Dependiendo de la problemática de tu sofá podemos darte algunas ideas para mejorar y alargar la vida de tu mueble.
Si se trata del hundimiento de la espuma, la compra de nuevo relleno es la mejor opción para mejorar la densidad de los cojines. Para ello, vacía el contenido por completo y aspira su interior, nunca está de más y así evitaras la aparición de ácaros. Introduce el nuevo relleno y listo para disfrutar de un sofá cómodo.
Por el contrario, si el problema lo encontramos en los muelles rotos, suele ser porque la estructura de madera va cediendo a la presión de los propios muelles y se quiebran los enlaces de manera que la estructura desciende considerablemente.
Para resolver este problema, una rápida solución es utilizar cáncamos o alcayatas para tacos, unimos de nuevo los muelles entre si y los apretamos introduciéndolos en la madera.
La suciedad es uno de los problemas más habituales, depende del material de nuestro sofá encontraremos soluciones más sencillas.
Por ejemplo, si se trata de cuero o piel bastará con un poco de agua caliente y un paño de fibra. Una vez aplicada la limpieza recomendamos utilizar crema hidratante, sirve por ejemplo la de manos, de este modo conseguimos hidratar el tejido y reducir el riesgo de grietas.
En el caso de que nuestro sofá esté fabricado en tela, podemos lavar los cojines directamente en la lavadora.
Para limpiar la estructura, si está muy sucio habrá que recurrir a máquinas de vapor caliente, con esto conseguimos afectar a la mayor parte de tejido. Las altas temperaturas ayudarán también a la lucha contra los ácaros.